¿Qué ves cuando miras atrás?
¿Te ves a ti?
¿Dónde quedaste? Ya no reconoces tu sombra,
¡Hace tanto que no la miras!,
La recuerdas como si fuera un espejismo y no quieres saber en qué te has convertido.
¿Dónde están las sombras que revoloteaban y robaban sonrisas?
¿Decepcionado? ¿Estas donde querías?
¡Qué paso pequeño!, ¡Qué paso para que abandonaras el camino!
Dónde quedaron los principios revoloteando en aquella cama mirando al techo y soñando con el mañana…
¿Cuándo hace que no sueñas?
¿De verás a veces piensas que aquel niño murió?
¿Dónde quedó el astronauta, los vaqueros?…
¡Encerrados y condenados!…
¿A qué temes para dejarlos salir?
Te dicen que la ternura es debilidad, pero ¿Dónde quedó aquel niño?
Escucha la música, sigue el ritmo y tus pies marcarán el camino.
Cuentos del Inframundo para zombis con resaka